Refugiados
Marlaska confirma que los migrantes del 'Aquarius' que no obtengan asilo serán expulsados
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, aseguró este jueves que los 629 migrantes del Aquarius recibirán a su llegada a España "tratamiento y trato idénticos" a los cientos de migrantes que arriban a la frontera sur en patera, es decir, quienes soliciten asilo tendrán acceso al procedimiento y quienes no reúnan las condiciones, podrán recibir un expediente de expulsión, informó Europa Press.
"El comportamiento del Gobierno hacia esas personas va a ser idéntico, aplicando la legalidad vigente, que da a aquellos otros que vienen por vía Marruecos o Argelia hacia nuestro país", señaló en una entrevista en Onda Cero recogida por Europa Press, en la que concretó que "se abrirán los expedientes, si solicitan asilo se tramitará y si no lo hacen, se tramitará el expediente de expulsión que proceda".
"No vamos a tratar distinto a las personas que vienen en el Aquarius que aquellas otras que vienen en pateras. El tratamiento es igual en uno y otro caso", insistió el nuevo ministro.
En este sentido, descartó la posibilidad de que a las 629 personas a bordo de esta embarcación gestionada por las ONG Médicos Sin Fronteras y SOS Mediterranée se les dé el estatuto de refugiado como en un primer momento se indicó y subrayó que "cualquier petición de asilo conlleva un trámite", cuyo procedimiento se rige por la ley de asilo de 2009 que, según denunciaron las ONG, todavía no tiene desarrollo normativo.
"Se abre expediente, se tramita conforme a la ley, y se decide si es susceptible de protección porque esté dentro de alguno de los parámetros", apuntó el titular de Interior, que advirtió de que en este momento no se puede avanzar más sobre posibles resoluciones porque "tienen su trámite". "Si no piden asilo, pues se verá su situación y, si procede la apertura de un expediente de expulsión, se abrirá. Es así", apostilló.
Asimismo, indicó que el asilo se otorga cuando hay persecución por motivos religiosos, étnicos, ideológicos o por orientación sexual. "Muchos, durante el tránsito, pasan algo más que calamidades, son explotados en todos los ámbitos y no lo tenemos que olvidar, pero hay muchos que quizá la base por la que vienen no es por persecución, sino por razones económicas", aseveró.
Grande-Marlaska apuntó que no todas las personas migrantes que arriban en patera a las costas españolas son internadas en los CIE sino que también son atendidas en centros gestionados por las ONG. "Los CIE no son la realidad de todos los que llegan, primero porque no hay plazas", subrayó.
En concreto, dijo que este fin de semana llegaron más de 500 en embarcaciones a la zona de Algeciras (Cádiz) y que, ante esta "avalancha" es "imposible" llevar a todas estas personas a estos centros de internamiento de extranjeros.
"Haré todo para que las concertinas puedan ser retiradas"
Por otro lado, el ministro del Interior aseguró también este jueves que tiene intención de retirar las concertinas de las vallas situadas en las fronteras terrestres de Ceuta y Melilla con Marruecos y piensa pedir para ello un "informe complementario". "Haré todo para que las concertinas puedan ser retiradas", señaló.
En una entrevista en Onda Cero recogida por Europa Press, Grande-Marlaska aseguró que retirar las concertinas es una de sus "principales voluntades" y "que haya un informe realmente complementario para que realmente se puedan adoptar otras medidas" porque no se puede "llegar a esos niveles".
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"Si estamos hablando de solidaridad, de respeto a la dignidad de las personas, controlando los flujos migratorios, porque lo uno no quita lo otro; ayudando en origen, colaborando con las autoridades de esos países y si después de todo, hemos fallado porque no hemos podido conseguirlo y esas personas ya están al lado de la valla, pues creo que es algo razonable", argumentó.
Las concertinas son unos alambres equipados con cuchillas cortantes que se instalaron coronando las vallas fronteriza de Ceuta y Melilla en el año 2005 por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, aunque dos años después, el mismo Ejecutivo ordenó retirarlas de parte del vallado melillense por las heridas que causaban en quienes intentaban rebasar el perímetro.
En 2013 el Gobierno de Mariano Rajoy decidió colocar más concertinas en las vallas fronterizas, que no sólo coronarían el perímetro sino que podrían encontrarse también a pie de alambrada y en el intervallado, lo que provocó numerosas críticas tanto de entidades sociales como de los grupos de la oposición. De hecho, en 2014, el ahora presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se comprometió a retirarlas en caso de que llegase a la Moncloa.