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PP y Junts impiden en el Senado la aprobación definitiva de la ley del 'solo sí es sí' por una letra

Irene Montero, en una sesión de control al Gobierno, en el Senado, a 10 de mayo de 2022

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El Gobierno no ha logrado aprobar este martes definitivamente la ley del solo sí es sí en el Senado, después de que una enmienda de Junts haya salido adelante con el apoyo del PP, ERC, Ciudadanos, Más Madrid y Coalición Canaria, entre otros. El texto tendrá que volver al Congreso, según ha proclamado esta tarde el presidente de la Cámara Alta, Ander Gil, y ha informado la institución a través de su cuenta de Twitter, según informa Europa Press.

Por tanto, la norma no se podrá aprobar hasta después del verano, pese a las previsiones del Ministerio de Igualdad, que esperaba que el texto entrase en vigor ya. Los letrados del Senado han avalado finalmente la enmienda aprobada tras estudiar si se había votado por error, según han confirmado fuentes parlamentarias. Las dudas han surgido porque la enmienda aprobada solo cambia una letra en todo el texto.

De este modo, aunque la ley ha sido aprobada por el Pleno del Senado con el apoyo de todos los grupos, excepto PP y Vox, no ha podido ser aprobada definitivamente y el presidente del Senado ha informado de que se dará traslado de dicha enmienda al Congreso de los Diputados para que se pronuncie sobre la misma. Pero la Cámara Baja no tiene prevista nuevas sesiones plenarias hasta el próximo curso parlamentario, que arrancará en septiembre.

Lío por una letra

La enmienda introducida en el texto que ha impedido aprobar definitivamente la ley es una adición a su preámbulo cuando se pide "dar respuesta a las violencias sexuales más ocultas". Concretamente, según la enmienda del Senado, Junts pedía la introducción específica de la mutilación genital femenina, la "detección de casos de aborto y esterilizaciones forzosos".

Fuentes de Igualdad consideran que la votación ha sido un error de los letrados porque el texto ya se había introducido en el Congreso. Sin embargo, hay una diferencia entre ambos párrafos: donde el texto del Congreso dice "casos de aborto y esterilizaciones forzosas", la enmienda del Senado dice "casos de aborto y esterilizaciones forzosos". Según las fuentes parlamentarias, no se trata de un cambio de una letra sino de un cambio de concepto que pretende especificar que el adjetivo forzosos abarca tanto a las esterilizaciones como a los abortos, lo que aclararía que no es violencia oculta cualquier tipo de aborto sino solo los forzosos.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, que ha intervenido este martes por la mañana en el Pleno del Senado, tres horas antes de la votación, había dado por hecho que la ley se aprobaría definitivamente.

El verano de las mujeres

"Hoy decimos a nuestra hijas, amigas, compañeras de trabajo, que su presente y su futuro va a ser mucho más libre que nuestro pasado", ha afirmado Montero. También desde la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género se ha difundido un vídeo por su cuenta de Twitter en el que se anunciaba que "2022 será el verano de las mujeres". "Este será el verano del consentimiento y del solo sí es sí", añadía esta misma mañana la delegada del Gobierno, Victoria Rosell, en rueda de prensa.

Por su parte, el portavoz del PP en el Senado, Javier Maroto, ha bromeado en Twitter sobre la vuelta al Congreso de la norma. "Enhorabuena, Irene", ha añadido tras recordar que la ministra ha intervenido en el pleno del Senado dando por aprobada la ley. Entre otras novedades, la ley del solo sí es sí recoge una nueva definición de consentimiento que señala que "solo se entenderá que hay consentimiento cuando se haya manifestado libremente mediante actos que, en atención a las circunstancias del caso, expresen de manera clara la voluntad de la persona".

Además, reforma el Código penal para eliminar la distinción entre abuso y agresión sexual, entre otras cuestiones y, finalmente, no incluye las medidas relacionadas con la prostitución y la lucha contra la trata con fines de explotación sexual.

Para la ministra de Igualdad, con esta ley, España dará "un paso decisivo para responder a la deuda histórica del Estado y las instituciones con Nagore (Laffage) y su madre, con las jóvenes de Alcácer, con la víctima de 'La Manada' de Pamplona y la de Manresa, con Laura Luelmo, con las mujeres agredidas en estos Sanfermines" y con todas "las mujeres que han sufrido algún tipo de violencia machista".

PP y Vox rechazan el texto

En el debate –que ha comenzado con un minuto de silencio por las últimas cinco víctimas de la violencia de género– PP y Vox se han vuelto a mostrar contrarios al texto en su defensa de las propuestas de veto. En palabras del diputado de Vox, José Manuel Marín Gascón, se trata de "una chapuza jurídica" ya que, a su juicio, "este proyecto de ley viola la técnica jurídica más elemental, viola derechos fundamentales, viola la igualdad, viola la libertad y viola hasta el sentido común más básico".

Para Gascón, la "ley del solo sí es sí es en realidad la ley del no, del no a derechos fundamentales, como la presunción de inocencia", además de cuestionar que "no agrava las penas". También ha denunciado que la ley "adoctrina" y "conduce al enfrentamiento visceral entre hombres y mujeres".

Desde el Grupo Parlamentario Popular, María Adelaida Pedrosa Roldán, ha lamentado que se trata de "una mala ley, con un sesgo ideológico" ya que el texto "instrumentaliza el dolor y el sentimiento de las víctimas". "Tenemos delante una ley que deja desprotegidas a las víctimas y en el aire sus derechos, entre otras cuestiones", ha afirmado. Pedrosa también ha hecho alusión a la dimisión de Adriana Lastra, la ya exvicesecretaria general del PSOE, "por estar embarazada". "¿Dónde están las feministas de su partido, porque un embarazo no justifica una dimisión?", se ha preguntado. En el turno en contra, la senadora del PSOE, María Elena Diego Castellanos, ha lamentado las intervenciones de ambas formaciones, subrayando que "la violencia que se ejerce contra las mujeres es una cuestión de Estado".

"Esto no es una broma, esto no va de piropos, va de una cultura machista que impregna nuestra sociedad, nuestro lenguaje y nuestra educación y de que nunca se ha preguntado a las mujeres y las niñas que se sienten en situaciones de acoso real y normalizado en nuestras calles. Estamos hablando de algo mucho más serio", ha zanjado.

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En el turno de portavoces, la mayoría de las intervenciones se han mostrado a favor de la ley y contrarios a los vetos, como ha manifestado la senadora Pilar González (Grupo Parlamentario de Izquierda Confederal) ya que, en su opinión, los vetos hacen "retroceder a un tiempo oscuro", en línea con María Teresa Rivero Segalàs (JxCat), quién ha reconocido que es "una ley mejorable, pero es del todo necesaria". "Es un paso muy importante", ha dicho, aunque ha precisado "que solo con esta ley no vamos a hacer que el mundo sea sea más seguro". "Nos falta mucho recorrido, mucha pedagogía y seguramente tendremos que batallar", ha asegurado.

La senadora María Dolores Etxano Varela (EAJ-PNV) ha reclamado "la necesaria puesta en marcha de recursos adecuados" para ayudar a las víctimas, mientras que la senadora de ERC, Sara Bailac, ha sentenciado: "quien no esté preparado para vivir en el siglo XXI, que vuelva a la Cueva". Jaime de los Santos (PP) y María Elena Diego Castellanos (PSOE) han protagonizado uno de los 'rifirrafes' del debate al referirse el primero a los casos de abusos a menores tuteladas en la Generalitat Valencia y Baleares. "Hermanas, sí te creo, a excepción", de estos casos, ha referido, además de negar que el PP haga uso de las víctimas, que sí ha achacado al Ejecutivo y que ha negado Castellanos.

"Es muy lamentable tanto el veto de Vox como ustedes han dicho que están en contra de esta ley porque tiene un sesgo ideológico. Somos políticos, no tenemos ideología", ha defendido la senadora socialista.

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