El Plan de Victoria de Zelensky que busca la paz para dentro de menos de un año
Está pasando desapercibido en los medios de comunicación la trascendencia del plan de paz de Zelensky, al que llama “Plan de Victoria”, que anunció en la Asamblea General de las Naciones Unidas a finales de septiembre y que ha vuelto a presentar en el Consejo Europeo en Bruselas del 17 y 18 de octubre. Sin embargo, no se ha publicado, hasta ahora, el plan completo, que mantiene en secreto. De lo que se ha hecho público, el mismo reitera sus conocidos argumentos pero establece, a mi juicio, cinco novedades.
Quizás lo más llamativo es la petición de Ucrania de que se le invite a unirse a la OTAN, lo cual a nadie se le oculta las dificultades de fondo que tiene. En definitiva, implicaría que la OTAN garantizara su integridad territorial en la aplicación del Artículo 5 del Tratado de Washington. Esto produciría un cambio cualitativo en el enfrentamiento con Rusia por parte de la OTAN. No obstante, él insiste en que solo con la invitación, que no tiene obligaciones inmediatas, podría tener una repercusión trascendental.
En segundo lugar, exige el refuerzo de la defensa ucraniana contra el ejército ruso, lo que incluye obtener el permiso de los aliados para utilizar sus armas de largo alcance en territorio del país vecino y proseguir las operaciones militares de Ucrania en territorio ruso para evitar la creación de "zonas de amortiguación" en Ucrania. Cabe recordar que Putin se había marcado como objetivo expulsar a las tropas ucranianas de la provincia rusa de Kursk antes del final de octubre. Por el momento, la incursión ucraniana en Rusia se mantiene estable durante casi tres meses.
Además, ha obtenido el efecto de paralizar los avances rusos en el Donbás, donde se dio por hecho que iban a conseguir ocupar importantes ciudades. Sin embargo, esto no fue así porque Rusia tuvo que retirar a algunas de sus tropas de este frente para frenar la invasión ucraniana de Rusia, que consiguió resultados como la destrucción de varias bases militares. De tal forma, la incursión de Ucrania en territorio ruso, que en muchos ámbitos parecía una locura que no iba a durar más que días, de momento está teniendo resultados.
El tercer punto del Plan de Victoria busca la contención de Rusia mediante el despliegue en suelo ucraniano de un paquete de disuasión estratégica no nuclear, lo que implica también un cambio cualitativo de utilizar armas de los países miembros de la OTAN para este cometido. Hasta ahora, solo hay una misión de entrenamiento de la Unión Europea a las tropas ucranianas en suelo comunitario. Por ejemplo, destaca los impactos de largo alcance en Crimea, que han conseguido destruir 23 barcos enemigos y donde Rusia, a su vez, ha retirado nacionales rusos y parte de sus defensas.
El cuarto punto exige la protección conjunta de Estados Unidos y la Unión Europea de los recursos naturales fundamentales de Ucrania y uso conjunto de su potencial económico. Esto implica más sanciones a Rusia por la explotación de los recursos de los que se ha apropiado durante la guerra. Por último, en el quinto punto pide que, en la fase de la posguerra, las fuerzas armadas ucranianas están en disposición de sustituir a algunas tropas estadounidenses desplegadas en el continente europeo, como una de las aportaciones que tendría su entrada en la OTAN.
El nuevo Secretario General de la OTAN, Mark Rutte, durante la visita de Zelensky a la sede de la organización en Bruselas estos mismos días, reiteró que Ucrania algún día será miembro. “Entre ahora y entonces, haremos todo para que Ucrania tenga lo necesario para vencer”, prometió. A este respecto, además, el Consejo Europeo del 17 y 18 de octubre ha dicho que está preparado para medidas adicionales para limitar la capacidad de Rusia de continuar la guerra.
Zelensky también clama que Rusia no está buscando el final de la guerra, sino su continuidad
Zelensky también clama que Rusia no está buscando el final de la guerra, sino su continuidad. Para ello, Moscú está pidiendo ayuda tanto a China como a Irán y, especialmente, a Corea del Norte, con quien acaba de acordar el despliegue de 10.000 soldados norcoreanos en el territorio del Donbás, donde ya han llegado los 1.000 primeros. Por lo tanto, es importante resaltar que, si bien en nuestros medios se está señalando que Ucrania no tiene suficientes soldados, que posiblemente es el caso, sin embargo quien verdaderamente tiene necesidad es Rusia.
A pesar de los problemas que está encontrando Rusia en mantener la agresión a Ucrania, el día 22 de octubre ha organizado una operación política internacional de alcance, que al menos va a permitir ocultar, de momento, los traspiés que está teniendo en el ámbito de la defensa. Esta es la organización de la Cumbre de los BRICS, siendo Rusia a quien le toca ostentar la presidencia rotatoria. Para ello, se reúnen en Kazán los dirigentes de China, India, Sudáfrica, Egipto y Brasil. Habrá que evaluar qué ventajas reales va a tener para Rusia este encuentro.
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Francisco Aldecoa es presidente del Consejo Federal Español del Movimiento Europeo y catedrático emérito de Relaciones Internacionales en la UCM.
