El año del tope al gas termina con electricidad casi gratis gracias a las renovables

El año que cierra será recordado por el precio disparatado de la factura energética y el impacto que sufrieron millones de hogares vulnerables. Pero 2022 termina con una buena noticia: el precio de la luz estos días es irrisorio, con horas donde la electricidad es prácticamente gratuita. 

Durante la Nochevieja, el precio medio de la luz para los consumidores del mercado regulado (PVPC) será de 2,65 euros por megavatio hora, un 98% más barato que la media de este año y el valor más bajo desde hace casi dos años. Este sábado habrá incluso tres horas en las que la luz cueste literalmente 0 euros, entre las 03.00 y las 6.00 de la madrugada, y más tarde, justo antes de las campanadas, costará 0,10 euros por megavatio hora, casi regalada. 

Los expertos afirman que esta rebaja se mantendrá unos días, un alivio tras varias semanas de precios anormalmente altos. "La factura media de este mes va a cerrar en 55 euros por hogar. Iba camino de los 70, pero en los últimos días ha dado una bajada radical", explica José Luis Sancha, experto del mercado eléctrico de la Universidad ICAI Comillas. Sus cálculos son para una vivienda con factura regulada (PVPC), con una potencia contrata de 4 kilovatios y un consumo de 200 kilovatios hora al mes. Lo más importante, según Sancha, es que el coste del recibo es ya similar al de mayo de 2021. "El precio de la luz está ya en niveles precrisis", resume. 

Los responsables de que la energía sea tan barata son el tiempo invernal y la caída del consumo de energía por las fiestas debido al cierre de oficinas y fábricas. Las intensas lluvias de la semana pasada han rellenado los raquíticos embalses de la península y han permitido generar mucha electricidad en las centrales hidráulicas, a la vez que el viento ha movido la eólica. De hecho, más del 60% de la electricidad generada este viernes fue renovable, que es mucho más barata que el resto. 

Sancha también recalca el papel de la bajada de los costes regulados. "La factura está muy desequilibrada porque la energía es el doble de cara, pero han bajado los cargos, el impuesto eléctrico, el IVA... y eso compensa la subida", explica el experto. Estas medidas han sido prolongadas para que también funcionen en 2023 y también se mantendrá el bono social eléctrico. 

El cambio climático también deja un comienzo de año más cálido de lo normal, lo que ayuda a rebajar el consumo de luz y a bajar su precio. La temperatura este sábado en España será alrededor de 4 grados superior a la media de otros años, según los meteorólogos de Maxar, aunque las temperaturas volverán poco a poco a la normalidad la semana que viene. 

La anomalía térmica es incluso más intensa en Europa Central, con temperaturas entre 6 y 12 grados por encima de la media. Esta situación también ha hundido el precio de la energía en el continente, hasta el punto de que los alemanes llegarán a pagar precios negativos por consumir luz: -0,78 euros por megavatio hora. Esto solo ocurre cuando la población consume muy poca energía y las compañías no pueden parar la producción por el coste que supone apagar y encender, por ejemplo, una central nuclear. 

¿Y el tope del gas? 

El mecanismo ibérico para limitar el precio del gas ha sido la principal arma que ha rebajado la factura de la luz este año, aunque tiene un impacto escaso en estos últimos días. Como relata Pedro Fresco, exdirector de Transición Ecológica de la Generalitat Valenciana, cuando la mayoría de la electricidad se genera con fuentes renovables, como ocurre ahora, se encienden menos centrales de ciclo combinado. Solo lo hacen aquellas que son más modernas –y que consumen menos gas— o las que tienen exceso de reservas de gas y tienen que deshacerse de él, por lo que venden su electricidad producida muy barata para asegurarse de que el mercado la compra.

"El tope del gas es contraintuitivo y funciona cuando el coste de la materia prima es muy alto. De hecho, si no hubiese tope del gas estos días, el precio sería seguramente el mismo", afirma Fresco. En todo caso, el experto asegura que este mecanismo ha sido determinante este año, especialmente en verano y durante algunas semanas de noviembre y diciembre.

Acaba el año con la luz más cara de la historia 

Este sábado termina un año para recordar en el sector energético, con un precio medio de la electricidad de 168 euros por megavatio hora, según los datos recopilados por Manuel H. Arias, un analista independiente del mercado eléctrico. Esta cifra es la más cara registrada en España y evidencia el impacto que ha tenido la dependencia europea del gas ruso, en connivencia con un año especialmente seco que ha hundido la generación hidroeléctrica debido al cambio climático. 

La debilidad de las renovables en muchos meses de 2022 ha provocado que el gas natural haya sido la principal fuente de generación eléctrica. Mediante la quema de gas se ha producido el 23,1% de la electricidad generada en España, seguida de la eólica (22,7%), la nuclear (21,4%), la solar fotovoltaica (10,4%) y la hidráulica (6,9%). 

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En el pasado, el gas solía ser la tercera fuente de producción de luz, pero al situarse la primera se han emitido 7,5 millones de toneladas de CO₂ para generar electricidad, según Red Eléctrica, un 55% más que el año pasado. Además de contaminar más, la mayor exposición al gas ha provocado que la factura haya sido tan sensible a las sanciones a Rusia, el cuarto principal proveedor de España de esta materia prima. También ha influido que durante gran parte del año se ha generado más luz de la necesaria para ayudar a Francia, que ha tenido graves problemas de suministro por el parón de las nucleares por problemas técnicos.

De cara a 2023, Pedro Fresco cree que la energía se encarecerá en el primer trimestre del año si Europa sufre el frío invernal, aunque después debería volver a abaratarse el recibo. "A partir de marzo se recuperará la energía solar y el deshielo llevará a máximos a la hidráulica, por lo que se quemará menos gas", opina.

El futuro dependerá, según los dos analistas, de cómo funcionen las renovables. "España tiene mucha verde y eso abarata la luz, pero hace falta que llueva, que haga viento y que haga sol", zanja José Luis Sancha.