LA PORTADA DE MAÑANA
Ver
La cumbre de presidentes se salda sin acuerdos pero con un frente abierto en el PP por la quita de la deuda

Conferencia de Presidentes

La cumbre de presidentes se salda sin acuerdos pero con un frente abierto en el PP por la quita de la deuda

El rey Felipe VI, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y los presidentes autonómicos posan para la foto de familia.

El Partido Popular llevaba meses reclamando la celebración de la Conferencia de Presidentes —hasta el punto de que varias autonomías recurrieron ante el Tribunal Supremo para tratar de forzar el encuentro— y, sin embargo, sus dirigentes autonómicos no han salido reforzados de la cita celebrada en Santander este viernes. Aunque las once autonomías presididas por el PP formaron un frente común en contra de que se reconozca la singularidad fiscal de Cataluña, no se mantuvieron tan unidas con lo que respecta a la quita de la deuda, el asunto que centró el debate sobre financiación autonómica.

Se trata de la condonación de deuda a la que el Gobierno se comprometió a extender a todas las autonomías tras pactarlo primero con la Generalitat de Cataluña. Fue el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, el que anunció a primera hora de la mañana que en enero se celebrará una reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera para "impulsar la asunción por el Estado de parte del endeudamiento de las comunidades autónomas del régimen común". Una cuestión que genera tiranteces entre las autonomías del PP, ya que algunas están dispuestas a aceptar la condonación si es para todos y otras se niegan.

La voz más beligerante sobre esa condonación es la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, que únicamente defendió la exención para la Comunitat Valenciana —como consecuencia de la "herencia recibida", en sus palabras, y para hacer frente a las consecuencias de la catástrofe de la dana—. "Me gustaría que me explicaran que es esto de condonar deudas, condonas deudas y qué: ¿se evaporan las dudas y quedamos en tablas?", preguntó retóricamente, para después añadir que el "conchabeo" le "parece injusto y, proporcionalmente, una locura": "Lo van a heredar las siguientes generaciones".

El valenciano Carlos Mazón, abiertamente cuestionado en el PP por su gestión de las riadas, se mostró favorable a "abordar el problema de la deuda" siempre y cuándo "se haga de forma complementaria" y se ligue a la reforma del sistema. "Hablar simplemente de una condonación de la deuda es como el que debe una hipoteca pero no le cobran una cuota", afirmó. Sin embargo, vendió su caso como "excepcional": "Para cupos, excepcionales y bilateralidades, el caso único es el valenciano", zanjaba.

Durante su reunión con Sánchez hace dos meses, el president de la Generalitat Valenciana presentó una propuesta para reclamar un fondo de nivelación solo las comunidades autónomas infrafinanciadas. Una propuesta que también le trasladó el presidente murciano, Fernando López Miras, que aunque este viernes censuró que el Gobierno no había lanzado ninguna propuesta concreta en la reforma del sistema de financiación, fuentes de su entorno sí se mostraban favorables en privado a la quita para todos.

Por su parte, el presidente andaluz, Juanma Moreno, también evitó rechazar públicamente esta fórmula. Lo que sí hizo fue poner el acento en que se debe conocer todavía "la letra pequeña" de esa condonación que el Gobierno asegura que extenderá a todos los territorios y afirmó que lo que "interesa" al Ejecutivo de Sánchez es la quita de la deuda.

Rajoy creó el FLA y el PP defendió su eliminación en su programa del 23J

El debate sobre la quita de la deuda viene de lejos. En plena crisis económica, el Gobierno de Mariano Rajoy creó el conocido como Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) para comprar la deuda de los Gobierno regionales, ya que actores terceros no pujaban por ella o pedían intereses elevadísimos. Esa fórmula creada por el PP era voluntaria para las autonomías y se adhirieron a ella las comunidades de Aragón, Balears, Cantabria, Castilla-La Mancha, Cataluña, Extremadura, Galicia, Murcia, La Rioja y la Comunitat Valenciana.

Cataluña es precisamente la comunidad, según los datos del Banco de España, que más debe al FLA, con 73.110 millones de euros, por delante de la Comunitat Valenciana (48.344 millones de euros) y Andalucía (25.409 millones de euros). Detrás aparecen: Castilla-La Mancha (11.363 millones de euros), Murcia (10.286 millones de euros), Aragón (5.053 millones de euros), Balears (4.916 millones de euros), Cantabria (3.090 millones de euros) y Galicia (2.759 millones de euros). Madrid no se adhirió al sistema del FLA y se financia exclusivamente en el mercado sin depender de la compra por parte del Estado, pero es la tercera autonomía de España con más deuda pública.

La quita de deuda de las comunidades autónomas para tratar de que vuelvan con normalidad a los mercados financieros no es precisamente algo ajeno al Partido Popular, ya que en su programa electoral para las elecciones del 23 de julio se apostaba por una “eliminación ordenada del FLA”. Sin embargo, en la reunión con todos los presidentes autonómicos del PP el pasado mes de septiembre, el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, instó a sus barones a no negociar de manera bilateral con Sánchez.

Sin acuerdos pero con un "tono constructivo"

Con todo, la cumbre de presidentes de Santander se ha saldado sin ningún acuerdo concreto tras cinco horas de intervenciones, a diferencia de lo que sucedió en la conferencia de La Palma, donde sí se cerró un texto de respuesta a la guerra de Ucrania y la inflación. La intención inicial del Ejecutivo de Sánchez era tratar de buscar consensos en materia de vivienda, ya que inicialmente quería convertir la cita en un monográfico sobre este asunto, pero la presión del PP —y su mayoría absoluta en el Senado— le obligó a incluir otras problemáticas.

El presidente del Gobierno ofreció a los dirigentes autonómicos "blindar el carácter social de las viviendas financiadas con dinero público de forma permanente e irreversible", con el objetivo de asegurar "que el parque público de vivienda asequible siga creciendo y llegue al 20%", y también les instó a aprobar la reforma de la Ley del Suelo, que el Ejecutivo se vio obligado a retirar el pasado mes de mayo, con el objetivo de “ofrecer más seguridad jurídica a los ayuntamientos a la hora de modificar sus planes urbanísticos".

Tampoco obtuvo el presidente respuesta, al menos por parte del PP, a la propuesta de “acordar de una vez una solución compartida al problema del reparto de los menores no acompañados a través de criterios objetivos, apelando a la solidaridad de todas las comunidades” y que “se sumen a una política migratoria responsable y solidaria". En cambio los presidentes de Canarias, Fernando Clavijo, y de País Vasco, Imanol Pradales, sí secundaron la iniciativa.

Cuando el PP exigió fulminar a Silvia Intxaurrondo, Xabier Fortes y David Broncano

En materia sanitaria, Sánchez anunció que transferirá 223 millones de euros extraordinarios a principios de 2025 a las autonomías “para que financien la adopción y desarrollo de nuevas soluciones sanitarias basadas en Inteligencia Artificial" y que "consolidará y aumentará la financiación de nuevas plazas para profesiones sanitarias en las universidades públicas" si las autonomías se comprometen a cofinanciarlo.

Pese a la ausencia de acuerdos concretos, el tono general fue positivo, según destacó el ministro Ángel Víctor Torres al finalizar el encuentro: "Decían que este país se rompía y hoy tenemos a todos los presidentes sentados y con un tono constructivo, muy distinto al del Congreso y el Senado, hemos hablado de lo que interesa a la gente", afirmó.

Menos optimistas, sin embargo, se mostraron los dirigentes del PP, que reprocharon al Ejecutivo que no se había preparado la cita lo suficiente, aunque evitaron confrontar con Sánchez en materias como la corrupción como sí hace todas las semanas el líder de su partido en el Congreso.

Más sobre este tema
stats