Hambre
Moratinos confía más en los ciudadanos que en los políticos para luchar contra el hambre
"Cada cinco segundos muere un niño de hambre". Este ha sido el dato con el que el moderador ha abierto la charla de presentación del nuevo libro del exministro de Asuntos Exteriores Miguel Ángel Moratinos, La lucha contra el hambreLa lucha contra el hambre, en el cual el que fuera jefe de la diplomacia española entre 2004 y 2010 bajo la presidencia de José Luis Rodríguez Zapatero llama a una "movilización colectiva de la sociedad civil global" para acabar con este problema.
En la charla, en la que además de Moratinos han participado el periodista Enric Sopena, director del diario El Plural, y Jesús Maraña, director editorial de infoLibre, se ha planteado el dilema de si es realmente posible acabar con la hambruna a nivel mundial. En este sentido, Moratinos ha asegurado que no sólo es algo factible, sino que lejos de ser una "utopía", se trata de una "necesidad apremiante". Sin embargo, el exministro también ha llamado a la ciudadanía a movilizarse porque, según él, sin esta movilización los políticos no avanzarán en la búsqueda de una solución.
"Como conozco a la clase política, veo que en el momento actual tanto la clase política internacional como nacional es incapaz de cambiar la agenda, las prioridades y las actuaciones en la lucha contra el hambre", ha denunciado Moratinos, que también ha relatado que cuando comenzó a visitar los países africanos en su campaña para presidir la FAO vio los "obstáculos dentro de la propia organización y de las instituciones internacionales".
"El ejemplo de Somalia fue el que me sacó de mis casillas, porque sabemos que todos los años va a haber hambruna, y podemos predecir si va a haber o no lluvias y si, por tanto, el ganado va a poderse alimentar y va a poder dar leche y comida a unos cuantos ciudadanos. Lo sabemos, pero nos refugiamos en las estadísticas" ha lamentado el exministro, que ha vaticinado que "cuando se reúnan en 2015 los jefes de Estado y de Gobierno dirán si ha mejorado el nivel de reducción del hambre", pero no se hablará sobre "si hay 800 millones de personas, de carne y hueso, que están pidiendo ser alimentados y tener la misma dignidad que todos nosotros".
En este sentido, Moratinos ha pedido "pasar a la acción". "No podemos esperar a 2015, no podemos esperar nuevas estadísticas", ha reclamado el exministro, que se ha preguntado retóricamente "qué hace" la FAO. "¿Por qué no actúan si tenemos medios?" ha cuestionado Moratinos, que ha afirmado que "para que intervengan [en la lucha contra el hambre] hace falta que la ciudadanía se rebele y se movilice".
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En la misma línea ha intervenido Jesús Maraña, que ha denunciado que el poder político lleva años utilizando "excusas" como la 'guerra contra el terrorismo' impulsada tras los atentados del 11-S o la crisis económica actual para "dejar en un segundo plano" el problema del hambre. En este sentido, el periodista ha señalado que "intereses determinados se empeñan en mantener como una utopía la lucha contra el hambre, cuando los datos y la realidad económica global indican que es posible abordar esa tarea".
"La especulación ha permitido que quienes ya no podían estar interesados en la especulación de derivados, subprimes y otros productos financieros se volcaran en hacer negocio con el precio de los alimentos básicos", ha manifestado Maraña. Por ello, el director editorial de infoLibre ha coincidido con Moratinos en que el propósito del libro es "concienciar y movilizar a la gente respecto a este problema", y ha destacado las propuestas concretas que contiene el libro, entre las que se cuentan que los estados tengan obligación legal de destinar parte de su presupuesto a la lucha contra el hambre o la implantación de tasas a sectores como el de las telecomunicaciones para financiar programas en este sentido.
Además, Maraña ha reivindicado una mayor transparencia de los grandes bancos a la hora de explicar a sus clientes "dónde se invierte su dinero", ya que ha asegurado que muchos de ellos "especulan" con estos fondos para "bloquear la lucha contra el hambre". "Hay que empezar a exigir información precisa sobre qué se hace con el dinero", ha reclamado el periodista, que en esta línea ha tachado de "incalificable" que "se siga diciendo que es una utopía acabar con el hambre". "Hay que empezar por avergonzar a quienes tienen la responsabilidad política, económica o financiera, de aportar soluciones o por lo menos de no bloquearlas".