El incendio entre Castellón y Teruel avanza con "gran voracidad" a expensas de los cambios meteorológicos

Los incendios forestales de San Agustín (Teruel) y Villanueva de Viver (Castellón), que han quemado ya más de 4.000 hectáreas y han provocado el desalojo de más de 1.700 personas, continúan avanzando a causa de las condiciones meteorológicas casi veraniegas a las que se están enfrentando los efectivos. Los presidentes de Aragón y la Comunidad Valenciana, Javier Lambán y Ximo Puig, en una comparecencia conjunta en la tarde de este sábado, han manifestado su inquietud por una "situación muy preocupante" y han pedido "toda la cautela y prudencia" ante unos fuegos que pese a todo, en la parte castellonense, se han conseguido "estabilizar" en un perímetro de 35 kilómetros.

El incendio de Villanueva de Viver avanza con "gran voracidad"

El incendio declarado en Villanueva de Viver (Castellón) avanza con "una gran voracidad" y los trabajos de extinción --en los que participan más de 700 personas-- presentan una "gran complejidad" ante unas "condiciones meteorológicas prácticamente de verano".

Así lo ha explicado este sábado el president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, en declaraciones a los medios tras la reunión del CECOP en el Puesto de Mando Avanzado (PMA), en la que ha estado acompañado por el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, pues el fuego presenta un "frente aragonés" que se está viendo más afectado en estos momentos por el viento de componente sur, y ha obligado a evacuar a unas 200 personas, que se suman a los 1.500 evacuados en municipios valencianos.

En este sentido, el jefe del Consell ha asegurado que se va a mantener "toda la cautela y prudencia" y se actuará según la evolución meteorológica "de cada momento", al tiempo que ha señalado que en la actualidad el incendio afecta más a la zona de Aragón, aunque se espera que a partir de este domingo afecta de nuevo al "frente valenciano".

Puig ha insistido en que el fuego se desarrolla en un "episodio casi de verano", por lo que ha aseverado que los efectivos están "absolutamente prevenidos para cambiar alguna estrategia si es necesario". "Ante la situación de sequía y crisis climática, con estos incendios de nueva generación estamos en la tormenta perfecta", ha apostillado.

Respecto a las posibles causas del incendio, se ha negado a "incorporar mayor confusión", y ha defendido que la Guardia Civil "está haciendo su trabajo con rigor como siempre y, en el momento oportuno, serán las autoridades correspondientes quienes informarán". "Ahora estamos ocupado, preocupados y concernidos por intentar apagar cuanto antes el incendio", ha declarado.

La situación en Aragón es "muy complicada"

Por otra parte, el presidente de Aragón, Javier Lambán, ha señalado que el incendio está en una situación "muy complicada", a expensas de los cambios meteorológicos, aunque el viento de componente sur afecta en mayor medida a la zona aragonesa.

El perímetro general del fuego supera los 35 kilómetros, aunque continúa estabilizado, pero las condiciones casi veraniegas dificultan las labores de extinción. Las hectáreas afectadas están en torno a las 3.800, según la última actualización de los medios sobre el terreno.

Javier Lambán ha garantizado que los operativos aragoneses se sentirán igual de concernidos con las labores de extinción con independencia de si la virulencia es mayor en la parte de Teruel o en la valenciana. Así, ha pedido "paciencia y comprensión" a las personas desalojadas. Puig también les ha pedido a los "máxima prudencia". "Sabemos la dificultad que tiene en estos momentos estar fuera de casa y queremos dar la mayor confortabilidad y desear que estén en las mejores condiciones posibles, teniendo en cuenta que se están protegiendo sus viviendas y sus enseres", ha enfatizado .

"No estamos habituados a este tipo de incendios 6.0, que en un momento determinado llegan a ser absolutamente incontrolables, y todavía estamos menos acostumbrados a que se produzcan en el mes de marzo", ha comentado Lambán. Ha recordado que las jornadas técnicas celebradas recientemente en Aragón "resultaron muy aleccionadoras" en la cuestión forestal.

Ha añadido: "Empezamos a tomar muy en serio lo que se nos puede venir encima en los próximos meses y años si no valoramos lo que se nos viene encima con la dimensión que realmente merece. Los incendios no se parecen nada a los que pudiera haber hace 30 o 40 años, ya que la acumulación de biomasa en el bosque por el abandono de las actividades agropecuarias hacen que sean auténticos polvorines".

En este sentido, Lambán ha precisado que un incendio forestal empieza a ser cada vez más un problema de protección civil "y a eso tendremos que ponerle remedio".

Igualmente, Puig ha abogado por "actualizar todos los procesos, también tecnológicos y en el ámbito de la prevención". "Hay una cuestión fundamental en estos incendios que es la despoblación: cuando la despoblación avanza, avanzan las posibilidades de mayores incendios", ha afirmado.

Magnífica cooperación entre comunidades

El president valenciano, ha destacado la "magnífica cooperación" entre comunidades, así como la ayuda de otras no afectadas por este fuego. Del mismo modo, ha elogiado el trabajo de las más de 700 personas desde diversos ámbitos, cooperando y colaborando, para hacer posible la extinción de este incendio. "Son profesionales que están garantizando la seguridad, también de las fuerzas de seguridad", ha añadido.

Lambán ha resaltado que siempre ha habido coordinación entre las comunidades autónomas cuando se han producido este tipo de percances, aunque esta es la primera vez, "y lo podemos decir muy orgullosos", el operativo se ha formalizado y se ha sistematizado, de modo que el que el Centro de Coordinación Operativa (CECOP) funciona con un mando único y eso supone un avance sustancial.

Además, ha expresado su gratitud a las comunidades autónomas que están colaborando en las labores de extinción, y a las que está previsto que se incorporen. También a la Unidad Militar de Emergencias (UME), "absolutamente imprescindibles en este tipo de circunstancias", a la Guardia Civil, a las policías autonómicas adscritas, a Cruz Roja, médicos y comarcas.

Medios de Castilla-La Mancha, Murcia y la Comunidad de Madrid

En las tareas de extinción participan medios de diferentes administraciones, incluidos los Bomberos de Diputación de Castellón, los bomberos de los Consorcios Provinciales de Alicante y Valencia, del Ayuntamiento de Castelló y València, bomberos forestales de la Generalitat, el Gobierno de Aragón y BRIF del Ministerio.

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Precisamente, la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, que ha visitado el PMA unas horas antes, ha señalado que durante este sábado se unirán a las tareas de extinción del incendio medios procedentes de Castilla-La Mancha, Murcia y la Comunidad de Madrid.

Asimismo, ha destacado la "gran colaboración y esfuerzo de todas las Administraciones" y, en concreto, la "coordinación" entre Aragón y la Comunitat Valenciana, al tiempo que ha asegurado que la jornada de este sábado es un "día muy importante", en el que todos los efectivos desplegados "tienen que trabajar a pleno rendimiento".

Bernabé ha detallado que el Gobierno de España ha movilizado un total de 267 efectivos de la UME y 74 medios aéreos y terrestres. Además, ha remarcado la "gran labor" de la Guardia Civil, con 215 efectivos que trabajan en el control de carreteras y gestión del tráfico, así como en distintos acompañamientos y en los desalojos durante las primeras horas del incendio.