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Madrid supera en un mes las alertas por ozono de todo 2023 mientras Almeida rechaza tomar medidas

Atasco en la autovía A6, a 24 de julio de 2024, en Madrid (España).

Los picos de calor de los últimos días han empeorado gravemente la calidad del aire de la ciudad de Madrid y sus alrededores, disparando uno de los contaminantes más agresivos para la salud, el ozono. Este gas oxidante e irritante se genera por la combinación de la radiación solar con la contaminación que expulsan los coches y en apenas cuatro semanas de julio se ha superado 60 veces el umbral de información por exceso de ozono, más que en todo 2023 (59). Y queda por delante medio verano. Precisamente esta semana se ha debatido en el Ayuntamiento a propuesta de Más Madrid poner por fin en marcha un mecanismo de emergencia para estas situaciones, pero el PP y Vox tumbaron la iniciativa.

Ecologistas en Acción dio la voz de alarma este jueves, en pleno día festivo, de que la capital estaba sufriendo un episodio muy duro de contaminación por ozono. Durante esa tarde se superó en 21 ocasiones del umbral de información a la población, que equivale a alcanzar durante una hora una concentración de ozono por encima de 180 microgramos por metro cúbico en alguna de las 13 estaciones de medición que hay en la ciudad. El pasado 4 de julio fue una jornada todavía más intensa, con 26 superaciones de ese umbral en un solo día.

Si la cifra llega a superar los 240 microgramos en Madrid, se habría activado el nivel de alerta, aunque nunca se ha alcanzado ese límite en la ciudad. De todas formas, concentraciones mucho menores de ozono también son dañinas para la salud y la Organización Mundial de la Salud recomienda una exposición máxima al ozono de 100 microgramos durante un máximo de cuatro días al año durante una exposición de ocho horas al día.

El problema es que aunque se llegasen a alcanzar los altísimos valores de un escenario de alerta, la ciudad de Madrid —y la Comunidad— no tienen un protocolo para frenar los picos de ozono. La normativa indica que si se superan los 240 microgramos "se convocará la Comisión de Calidad del aire de la ciudad", donde "podría valorarse la adopción de ciertas actuaciones concretas como la prohibición de determinadas actividades al aire libre (especialmente deportivas) principalmente entre la población de riesgo". Por tanto, esas medias llegarían cuando el daño ya está hecho, y en la ley no se valora actuar sobre la fuente de ese ozono, el tráfico rodado. Por otra parte, si lo que se registra es un umbral de aviso a la población, como el de esta semana, el Ayuntamiento manda un SMS a los vecinos que lo han pedido previamente y lo anuncia en su web. También publica un aviso en una cuenta específica de X con menos de 10.000 seguidores, pese a tener una cuenta oficial del consistorio con 860.000 seguidores.

Almeida rechaza la propuesta

Esta situación llevó este martes a Más Madrid a presentar una proposición para desarrollar un protocolo para evitar estos picos de ozono cuando se puedan prever con tiempo. También plantean mejorar la comunicación a la población de estos episodios y estudiar cómo el cambio climático agravará los niveles de ozono. "La calidad del aire en Madrid ha mejorado estos años gracias al plan de Manuel Carmena, pero todavía no se ha actuado sobre el ozono y hay que tomar medidas para proteger a la población", señala a infoLibre Esther Gómez, concejala de Más Madrid.

Sin embargo, la propuesta se quedó en un cajón porque ni Partido Popular ni Vox ni la apoyaron. "Lamentablemente no tuvo mucha repercusión porque la alcaldía se aferra a que los datos de contaminación han mejorado. Eso está muy bien, pero hay que seguir trabajando. Este año será el segundo peor de la última década en concentración de ozono, y seguirá creciendo en los siguientes por el cambio climático", añade Gómez.

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El concejal de Medioambiente del PP, Borja Carabante, argumentó en el pleno que por su parte ya estaba todo hecho. "Tenemos los mejores registros de la serie histórica en calidad del aire", apuntó, y reclamó que la elaboración de un plan contra el ozono es responsabilidad del Gobierno central. Carabante también sacó pecho de que la reducción de la contaminación —de dióxido de nitrógeno y de micropartículas, no de ozono— es gracias al plan Madrid 360, una reelaboración del plan Madrid Central elaborado durante la alcaldía de Más Madrid que intentó desmantelar sin éxito el alcalde del PP, José Luis Martínez-Almeida.

Desde Ecologistas en Acción critican que el protocolo actual contra el ozono es muy insuficiente y piden mirar a ciudades como Valladolid o París, que activan restricciones al tráfico en caso de alerta. "En 2020 y 2021 no se superó ni una sola hora el umbral de información por ozono porque se redujo el tráfico por la pandemia. Está bien claro lo que hay que hacer, fomentar el transporte público y limitar los coches", opina Juan Bárcena, responsable de Calidad del Aire de Ecologistas. 

El ozono es un gas altamente oxidante que, al inhalarse, a corto plazo genera irritación e inflamación en los pulmones y los ojos, incrementa el estrés y la ansiedad, y puede agravar otras enfermedades, Mientras que a largo plazo puede producir problemas crónicos en el sistema respiratorio, cardiovascular y endocrino. Un equipo liderado por Julio Díaz, investigador del Instituto de Salud Carlos III, estimó que, a corto plazo, la exposición al ozono provocó entre 2000 y 2009 unas 500 muertes prematuras al año en España. Mientras que la Agencia Europea de Medioambiente estima que en España se producen unos 2.400 fallecimientos al año por ozono.

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