Memoria histórica
"Murieron por la libertad de verdad, no la de tomar cañas": un centenar de personas rinde homenaje a las Trece Rosas
Un centenar de personas se ha congregado este jueves en el Cementerio de la Almudena para rendir homenaje a las Trece Rosas, las jóvenes vinculadas a las Juventudes Socialistas Unificadas asesinadas por el régimen franquista hace 82 años. El acto, organizado por el Partido Comunista de Madrid ha servido también para recordar a otros 43 jóvenes vinculados a la organización –los Cuarenta y Tres Claveles– que fueron fusilados durante aquel trágico 5 de agosto de 1939, una vez finalizada la Guerra Civil. "Murieron por la libertad, pero por la libertad de verdad, no la de tomar cañas", señalaron los organizadores durante el encuentro, en el que pidieron, como en su día hizo una de las muchachas, "que su nombre no se borre de la historia".
Las Trece Rosas fueron detenidas entre los meses de abril y mayo por su vinculación a las JSU, permaneciendo hasta el día de su asesinato encerradas en la prisión de Ventas junto a otras 4.000 reclusas y torturadas sin descanso para que revelasen el nombre de otros compañeros “enemigos de España”, tal y como fueron definidos hasta la saciedad por el régimen dictatorial franquista. El asesinato del comandante de la Guardia Civil Isaac Gabaldón, encargado por aquel entonces del Archivo de Masonería y Comunismo, fue el detonante de una terrible venganza contra más de medio centenar de personas, entre ellas las trece rosas.
Fueron acusadas de ser “miembros de la JSU y del Partido Comunista con enlace para ejecutar en nuestra patria órdenes emanadas del extranjero” con la “misión de hacer fracasar las instrucciones político-jurídicas de nuestro Estado Nacional”, según quedó recogido en la sentencia de la causa 30.426 dictada por el Consejo de Guerra Permanente número 9. “Adhesión a la rebelión”, concretamente, fue el delito por el que aquellos disparos segaron un 5 de agosto de 1939 la vida de Carmen Barrero, Luisa Rodríguez, Victoria Muñoz, Blanca Brisac, Julia Conesa, Ana López, Adelina García, Martina Barroso, Pilar Bueno, Elena Gil, Virtudes González,Joaquina López y Dionisia Manzanero.
Homenaje a las 'trece rosas' en el 78º aniversario de su fusilamiento: para que su nombre no se borre de la historia
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El Partido Comunista de Madrid (PCM), La Comuna y Foro por la Memoria se reunieron este jueves frente a la tapia en la que se les arrebató la vida. En el acto, se recordó el "ejemplo y la senda" de todas ellas. "Murieron por la libertad, pero por la libertad de verdad, no la de tomar cañas", apuntó la secretaria del Comité Regional del PCM, Ana Martínez de Arenaza, quien recordó que se vuelven a vivir días sombríos en los que el fascismo "difunde su mensaje de odio" de manera "constante" y "sin máscaras".
Durante su intervención, la dirigente comunista denunció el "insulto" a las víctimas, la verdad y la justicia por parte del Ayuntamiento de Madrid por "derribar el memorial" que comenzó a levantarse en el camposanto durante la etapa de Manuela Carmena y "mantener calles, placas y homenajes a ese periodo sombrío de nuestra historia". "Cuando la izquierda regrese, deberá reponerse ese memorial, deberán eliminarse las referencias al franquismo y tendrá que acabarse con la equidistancia entre víctimas y verdugos", sentenció Martínez de Arenaza.
También desde el Gobierno se ha recordado a las trece jóvenes en el 82º aniversario de su asesinato. "Las mataron por defender la democracia, por luchar por la libertad y la justicia social. Pero sus nombres nunca serán borrados de la historia", ha escrito en Twitter el presidente, Pedro Sánchez. Las ministras de Derechos Sociales, Igualdad y Trabajo –Ione Belarra, Irene Montero y Yolanda Díaz, respectivamente– también las han recordado en redes sociales. "Hoy más que nunca necesitamos memoria para avanzar hacia un futuro sin odio y con derechos. Las #13Rosas son un símbolo de lo mejor de nuestro país y de nuestra democracia. Para que sus nombres no se borren, sigamos trabajando por la justicia social y los derechos humanos", escribió Belarra.