García Montero se da de baja en IU Andalucía en apoyo de los 5.000 militantes expulsados en Madrid

Luis García Montero se da de baja como militante de Izquierda Unida en Andalucía. Lo hace "en solidaridad con los 5.000 militantes expulsados" en la comunidad de Madrid, a cuya presidencia aceptó concurrir como candidato en las elecciones del 24-M. La dirección federal de IU rompió definitivamente con Izquierda Unida-Comunidad de Madrid (IU-CM) hace una semana. 

El poeta anunció su decisión de darse de baja en IU en una charla que mantuvo este domingo en Madrid con miembros de Izquierda Abierta, la formación coliderada por Montse Muñoz y Gaspar Llamazares y a la que él pertenece y seguirá perteneciendo. "Nunca me gustaron los tribunales de la Inquisición", señaló, para explicar su decisión, según relataron fuentes de IU-CM. García Montero, con este gesto, quiere que su suerte sea la misma que corran los casi 5.000 militantes de la federación madrileña. Lo hace, pues, en "solidaridad" con ellos. 

El divorcio se aprobó el pasado 14 de junio y es un hecho. Ocurrió en el Consejo Político Federal (CPF), el máximo órgano de poder entre asambleas. El 70% de sus miembros validó la propuesta elaborada por el secretario de Organización, Adolfo Barrena, según la cual IU "se desvincula a todos los efectos, legales, jurídicos y políticos del partido político denominado IU-CM, registrado en el Ministerio del Interior en fecha 20 de marzo de 1996". En efecto, IU-CM tiene personalidad jurídica propia desde hace casi 20 años. Lo que hizo el CPF, pues, fue dejar de reconocer a IU-CM como su marca en Madrid. 

"No han dejado que se renueve"

IU pasó a crear una nueva federación madrileña, sin estatus jurídico propio, que está dirigida provisionalmente por la cúpula de Lara. A ella se pueden afiliar todos los que acepten "respetar planteamientos, estatutos y código de IU". Según la resolución, "ni un solo militante de IU-CM será dado de baja por la dirección federal". Los afiliados de IU-CM tendrán un plazo de tres meses para emigrar, si así lo desean, a la nueva estructura. 

Luis García Montero era militante de IU Andalucía desde su fundación, en 1986. Pero, tras lo ocurrido, ha considerado oportuno "solidaridarizarse" con los afiliados de IU-CM "expulsados". "No han dejado que la federación se renueve", lamentan desde su entorno, para añadir que "el PCE sigue tratando a Izquierda Unida como una máscara, y como no controlaba la organización en Madrid, la liquida antes de que pudiera completarse la renovación que se estaba configurando". García Montero seguirá en Izquierda Abierta, "pero no servirá de marioneta a los intereses del PCE", dicen las mismas fuentes.

García Montero no tiene intención de pedir el alta en la nueva estructura federal. Tampoco lo hará, previsiblemente, la madrileña Montse Muñoz. En su caso, su no reafiliación conllevará su expulsión de la ejecutiva de Lara, en la que ocupa el puesto de secretaria de Política Institucional. Cuadros de IU-CM han denunciado que Olimpo dispone de "listas negras", de modo que quien esté en ellas no podría reafiliarse.

En los órganos internos y en los tribunales

Desde la ruptura, IU no ha ampliado ninguna información de cuáles son sus planes. Ni tan siquiera ha adelantado cómo se llamará la nueva estructura. Sí ha exigido a IU-CM que deje de usar la marca IU. Lo hizo Barrena mediante burofax firmado el pasado 15 de junio, y al que ha tenido acceso infoLibre: "Les requerimos para que desde este momento cesen en la utilización de la denominación Izquierda Unida e Izquierda Unida de la Comunidad de Madrid en cualquier actividad, ya sea de índole privada, pública, interna o externa", atendiendo a que las siglas, seguidas del nombre de las distintas comunidades es "propiedad exclusiva de IU tal y como consta en nuestros estatutos federales y en los correspondientes registros públicos". Barrena ya advertía de que, de no obedecer, interpondría "las correspondientes acciones legales ante los tribunales de Justicia o administraciones públicas competentes".

IU-CM se niega a darse por vencida. Ese mismo día, recordó a Olimpo que IU-CM es un partido "registrado legalmente en el Registro de Partidos del Ministerio del Interior, por lo que el uso de la denominación se ajusta a la legalidad". Además, exigía la entrega de la base de datos "completa de afiliación" y que se abstuviera de su utilización, pues de lo contrario lo pondría en conocimiento de la Agencia Española de Protección de Datos por el "uso indebido y fraudulento de dicha información".

Este lunes, previsiblemente, IU-CM presentará el recurso ante la Comisión Federal de Garantías y, en paralelo, acudirá a los tribunales para defender los derechos, dice, de sus militantes, ante un "atropello" y una decisión "ilegal". 

García Montero fue la solución de emergencia que encontró IU-CM para suplir el vacío de la candidatura a la Presidencia de la Comunidad que había dejado Tania Sánchez, la ganadora de las primarias, con su marcha. Su propósito era superar el umbral del 5% para mantener la representación en la Asamblea y tirar a la vez de la lista de Raquel López para el Ayuntamiento de Madrid. Otra solución de emergencia para cubrir el hueco de Mauricio Valiente, que se marchó a Ahora Madrid (y que es hoy tercer teniente de alcaldesa). Pero ni él ni López consiguieron rebasar el listón: uno llegó al 4,16%; la otra, al 1,71%, por debajo incluso de UPyD. IU-CM se quedó fuera de las dos principales instituciones madrileñas por primera vez en su historia. En mitad de la campaña, miembros de la dirección federal de IU pidieron a través de un manifiesto el voto para Ahora Madrid en lugar de para la candidatura de Raquel López. 

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