Sánchez promete impulsar las lenguas cooficiales en la UE en plena negociación de la Mesa del Congreso
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, anunció este miércoles que promoverá el uso de las lenguas cooficiales en las instituciones europeas, lo que supone un guiño para los partidos nacionalistas e independentistas de cara la votación de la Mesa del Congreso y de una futura investidura.
Sánchez reunió este miércoles a la Ejecutiva del PSOE en la sede de Ferraz y posterior a los diputados y senadores en el Congreso para marcar la hoja de ruta un día antes de la constitución de las Cortes Generales.
El jefe del Ejecutivo aprovechó esas reuniones para proponer a su partido a Francina Armengol como presidenta del Congreso y a Guillermo Fernández Vara para la Vicepresidencia del Senado. Asimismo, informó de que mantendrá en sus puestos a Patxi López y Eva Granados como portavoces en las dos cámaras.
Durante su intervención en el Congreso, Sánchez criticó que el proyecto del PP ha "fracasado", por lo que pidió a los populares que no presionen al rey y respeten el artículo 99 de la Constitución. En todo momento, apostó por un Gobierno progresista que aguante toda la legislatura.
Guiño a la diversidad territorial
Sánchez aprovechó el discurso para hacer un guiño a la España territorial con su promesa de promover las lenguas cooficiales en las instituciones comunitarias, aprovechando la Presidencia española de la UE. "España habla en castellano, pero España también habla en catalán, en euskera y en gallego y, por tanto, nuestro deber es consolidar espacios de representación, de uso y de conocimiento de las lenguas de España", recalcó ante los diputados y senadores.
Para lanzar a la vez: "Debemos hacer más, podemos hacer más, y vamos a hacer más. La promoción de las lenguas cooficiales debe ser tarea de todas las instituciones, también del Poder Ejecutivo, y por eso quiero hacer el anuncio de que vamos a impulsar su uso en las instituciones comunitarias como un compromiso que voy a desplegar a lo largo de la Presidencia española de la Unión Europea".
Los mensajes al PP
Sánchez criticó duramente la actitud de los populares, poniendo el foco en su "incapacidad para asumir la realidad política, social y territorial de España". "Desde las elecciones, el Partido Popular vive en estado de shock. Han sido víctimas de su propia propaganda y han comprobado que se pueden amañar muchas encuestas, como han hecho, pero, desde luego, el voto en democracia no se puede amañar. Y la ciudadanía lo dijo muy claro el pasado 23 de julio: no a derogar; no a retroceder; no a perder derechos. Querían un plebiscito y lo tuvieron: perdieron el 23 de julio. Hace tiempo que el Partido Popular se dejó arrastrar por VOX y le llevó a este fracaso", remarcó el líder socialista.
Asimismo, tiró de ironía: "Andan quejosos porque, lo habréis visto, dicen no les hemos felicitado por su resultado electoral. Nuestro partido nunca ha puesto en duda ni la limpieza ni el desarrollo de unas elecciones democráticas. En fin, si hay que hacerlo, les felicitamos por sus resultados, también nosotros nos felicitamos por los nuestros y esperamos que cuando haya un nuevo Gobierno liderado por los socialistas no se ponga en duda su legitimidad tal y como vienen haciendo desde hace 5 años".
"La realidad -sostuvo Sánchez- ha quedado muy clara: y es que el PP ha dinamitado todos los puentes que conducen a pactos con cualquier otra fuerza política que no sea Vox. Y eso les deja más aislados que nunca".
Además, el presidente en funciones dejó este recado a Génova 13: "Vamos a pedir a los que presumen de constitucionalismo que respeten el artículo 99 de nuestra Constitución. Porque esta no es la hora, ni de presiones al jefe del Estado, ni de cábalas mágicas, esta es la hora de la democracia parlamentaria".
Una votación crucial
Las Cortes se constituyen este jueves con el nuevo reparto de escaños que dejó el 23 de julio. Y en el Congreso se vivirá una votación crucial para elegir a los miembros de la Mesa, el órgano encargado de dirigir la vida parlamentaria.
Esta votación supone la primera gran prueba de fuego entre los bloques, ya que tanto el PSOE como el PP aspiran a la Presidencia. Según el reglamento del Congreso, para llegar a lo más alto se debe lograr la mayoría absoluta en la primera votación. Si no se consigue la cifra mágica de 176 apoyos, se celebra una segunda ronda, en la que vencerá el que tenga más diputados a su favor.
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A continuación se eligen las cuatro Vicepresidencias en una única votación. Cada diputado escribirá un solo nombre y resultarán escogidos, por orden, los que más votos reciban. Con el mismo sistema se eligen las cuatro Secretarías. Si se produjera un empate, se celebrarán sucesivas votaciones entre los candidatos igualados en votos hasta que quede dirimido, según consta en el reglamento de la Cámara Baja.
Una vez elegidos los nueve miembros de la Mesa se situarán en sus escaños en la Presidencia del Hemiciclo. Y seguidamente se procede al acto de acatamiento de la Constitución, en primer lugar los miembros del órgano rector, a continuación, el resto de diputados en orden alfabético y por último los miembros del Gobierno en funciones que han obtenido escaño.
En estos momentos, la incertidumbre es máxima, ya que Armengol no tiene los votos suficientes cerrados y el PP aspira a atar 172 votos (con Vox, UPN y CC), mientras que el PSOE y Sumar quieren los sustentos de PNV, ERC y EH Bildu. Pero para ganar necesita a Junts o que Coalición Canaria se decante por la expresidenta de Balears.
