Autorregulación y transparencia: ¿cómo combatir los pseudomedios en la era de la desinformación?

“Si alguien viniera desde fuera y viera España, con el gobierno progresista que tenemos, la primera tentación que tendría sería decir: ‘qué bien estáis’. A lo que habría que responderle: ‘espera, que te cuento’”. Así comenzaba el periodista Pablo Elorduy, coordinador de política de El Salto, la presentación de la mesa redonda Impacto y retos de los medios de comunicación ante la desinformación, que cerraba las jornadas sobre desinformación organizadas por Comisiones Obreras. Durante la mañana de este miércoles, el sindicato ha congregado en la Escuela Sindical Muñiz Zapico de Madrid a escritores, periodistas, directores de periódicos y expertos en bulos e intoxicación mediática para hablar de esta problemática. 

En el estrado se sentaban a debatir, además de Elorduy, que hacía las veces de moderador, la directora de Público, Virginia Alonso, la directora de La Marea, Magda Bandera, el director de elDiario.es, Ignacio Escolar, y el director editorial de infoLibre, Jesús Maraña. Los cuatro hablaron de ese “espera que te cuento” al que hacía referencia el moderador y que aúna algunas de las problemáticas más graves a las que se enfrenta el periodismo actual: las campañas masivas de desinformación, los bulos construidos y la proliferación de pseudomedios que amplifican o directamente crean noticias falsas. 

Era el propio director editorial de infoLibre el que rompía el hielo con su primera intervención, donde pedía una mayor regulación y autorregulación del sector periodístico. “Cuidado con los que dicen que la mejor ley es la que no existe. Este es un mantra clásico del neoliberalismo que hay que negar, porque claro que hay cosas que se deben legislar”, decía Maraña, recordando a su vez el reciente Reglamento Europeo de Libertad de los Medios de Comunicación, con el que la Unión Europea quiere aumentar la transparencia de los medios y la equidad a la hora de repartir la publicidad institucional.

En una línea menos favorable a la regulación se ha colocado Alonso, la cual ha advertido de los peligros de una legislación reguladora de los medios en manos de gobiernos conservadores o ultras. “Ahora, con un gobierno progresista, podemos decir que estamos en buenas manos, pero en el futuro esas mismas leyes pueden ser utilizadas para guillotinar. Por eso debemos tener mucho cuidado”, explicaba la directora de Público. Por el contrario, Alonso reivindicaba la autorregulación y proponía algunas medidas como la creación de un registro oficial de medios al que, para entrar, se exija el cumplimiento de una serie de requisitos o la exigencia a los periodistas de que se colegien y, cuando incumplan el código deontológico, sean sancionados.

Ante los temores de Alonso del uso espurio que pueden hacer ciertos políticos de la legislación de medios, Escolar, también favorable a la regulación, ha respondido que esta debe estar “a prueba de Donald Trump”. “Ahora tenemos una ley de 1966 en vigor, de la época franquista. En el 78 se derogaron varios artículos, pero lo que sigue en vigor es peligroso y, aunque nadie se ha atrevido a usarla, deberíamos tener cuidado. La amenaza está precisamente en que no haya una regulación de prensa bien hecha”, ha recordado el director de elDiario.es.

Dejando a un lado el tema de la regulación, en la mesa redonda también se ha hablado de la forma en la que algunos periódicos abaratan sus suscripciones hasta extremos que dificultan la competencia. “La información es un derecho y no un negocio cualquiera. Si algo es gratis, hay trampa, porque alguien lo está pagando. Ahora mismo se ha reventado lo de las suscripciones, hay medios que las están regalando y eso es competencia desleal”, ha criticado Bandera.

En este sentido, Maraña también se ha sumado a la directora de La Marea en afear la conducta de algunos periódicos y, además, ha pedido diferenciar el periodismo de otros negocios digitales que dicen hacer periodismo pero que se dedican a otros fines. “Para hacerlo habría que establecer una serie de criterios, uno por ejemplo podría ser el garantizar que no hay trampas en las suscripciones, por ejemplo, obligando a diferenciar las que son individuales de las que son empresariales o colectivas. También dejar claro las cuotas que manejan, porque algunas sabemos que no pueden sostener una redacción”, explicaba el director editorial de infoLibre.

Por otra parte, todos los ponentes han coincidido en criticar el actual reparto de la publicidad institucional por parte de algunas corporaciones, en especial Ayuntamientos, que riegan con dinero público pseudomedios ultras. Muchos se basan en rankings de tráfico que, en opinión de los ponentes, muchas veces están viciados. “Ahora mismo entre el 40% y 60% de la audiencia de los medios digitales viene de Google Discover. Esto provoca que tengamos medios que no son de información porque buena parte de su tráfico viene de artículos que no tienen nada que ver con la información”, explicaba Escolar.

Los directores de eldiario.es, Público, La Marea e infoLibre debaten sobre el fenómeno de la desinformación

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Por todo ello, Maraña ha recalcado la necesidad de que todos los medios acepten unas condiciones básicas: “Por ejemplo, hacer público el accionariado del medio, decir de dónde vienen sus ingresos o establecer unos compromisos de lo que supone el periodismo. No solo es transparencia, es también saber que, cuando uno se equivoca, está obligado a rectificar”, ha reivindicado el director editorial de infoLibre. En una línea parecida, Escolar también ha establecido unos criterios que, a su juicio, deben cumplir los medios para ser considerados como tales: “Primero tienen que tener una redacción, y ya con eso quitas el 90% de estos pseudomedios, y luego se debería exigir una mínima transparencia, la adhesión a un código deontológico independiente y un mínimo de financiación que venga de los lectores”.

Por último, Alonso ha indicado que, dentro del top 10 de los medios con más tráfico, la mayoría de ellos son muy conservadores o se dedican a desinformar. “Por ello, si realmente pensamos que los medios somos el pilar de las democracias, y tenemos un gobierno progresista, no sé a qué estamos esperando para cambiar esto. A lo mejor con los siguientes, todos nosotros igual ya no estamos”, zanjó la directora de Público.

Cerró la jornada la secretaria confederal de CCOO, Empar Pablo, quien destacó el compromiso del sindicato para colaborar en todo debate que pueda servir para combatir la desinformación, "imprescindible en defensa de la democracia".