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Sancionar a un oligarca no es tan sencillo: así esconde sus bienes el multimillonario Usmanov

Usmanov

Miranda Patrucic e Ilya Lozovsky (OCCRP)

En respuesta a la invasión rusa de Ucrania, el oligarca ruso Alisher Usmanovuna de las 100 personas más ricas del mundo– ha sido sancionado por la Unión Europea, el Reino Unido y Estados Unidos.

Como figura especialmente bien conectada con el poder, Usmanov es un objetivo obvio. Se le ha acusado de estar cerca del presidente Putin, de proporcionar casas de lujo al ex primer ministro Dmitri Medvédev y de apoyar al régimen gobernante de Rusia. Como propietario del diario económico Kommersant, despidió a un editor y a un alto directivo que supervisaba su información sobre las violaciones electorales cometidas por el partido gobernante Rusia Unida.

Las sanciones occidentales contra los oligarcas rusos pretenden negarles el disfrute de su riqueza y, de hecho, castigarlos por su apoyo al régimen de Putin. Pero, como el mundo está descubriendo rápidamente, no es tan sencillo sancionar a un oligarca.

La villa sarda de Usmanov, de 17 millones de euros, parece haber sido confiscada por el Gobierno italiano. Sin embargo, las autoridades alemanas parecen haber tenido problemas para incautar formalmente su yate de 540 millones de euros, el Dilbar, que está amarrado en Hamburgo.

"El yate está registrado en las Islas Caimán y es propiedad de Klaret Continental Leasing, una empresa con sede en Malta", informó Forbes, "lo que dificulta su vinculación directa con Usmanov a efectos de sanciones". [Otros registros indican que ahora pertenece a Navis Marine Ltd].

Sobre el papel, Usmanov sólo tiene una participación del 49 por ciento en su principal conglomerado empresarial, lo que lo convierte en un objetivo difícil porque el Tesoro de Estados Unidos utiliza un umbral del 50 por ciento a la hora de imponer sanciones. (Él ha descrito este acuerdo como una "coincidencia").

Y tiene miles de millones en activos que serán aún más difíciles de rastrear. El empresario, nacido en Uzbekistán, ha pasado años moviendo dinero por todo el mundo entre familiares, empresas pantallas y fideicomisos.

Dada la habilidad de Usmanov para explotar el sistema financiero mundial y sus vacíos legales, no está claro que sea posible identificar todos sus activos, y mucho menos sancionarlos.

A partir de la información obtenida de varias filtraciones periodísticas y datos financieros, como los Suisse Secrets, los Papeles de Panamá y los FinCEN Files, los periodistas del consorcio OCCRP y de The Guardian han reconstruido una imagen parcial de cómo Usmanov ha ocultado sus activos en paraísos fiscales como Chipre, Bermudas y las Islas Vírgenes Británicas, y de cómo su dinero ha seguido fluyendo a través de entidades offshore (extraterritoriales) durante años, a pesar de que entidades bancarias han dado la voz de alarma sobre su origen desconocido y los indicios de posible blanqueo de capitales.

Aunque algunos de los datos se remontan a 2004, al menos algunas de las sociedades pantalla que Usmanov utilizó estaban operativas en fecha tan reciente como 2021.

En respuesta a las preguntas enviadas por los periodistas, un portavoz del oligarca negó que "el Sr. Usmanov haya repartido alguna vez su riqueza entre sus familiares con el fin de ocultarla a cualquier gobierno" y añadió que esta acusación es "infundada y sin fundamento".

Sin embargo, en una comunicación anterior, el servicio de prensa de Usmanov escribió que sus propiedades inmobiliarias en el Reino Unido y su enorme yate fueron "transferidos hace mucho tiempo a fideicomisos irrevocables" cuyos derechos de usufructo pertenecen ahora a su familia.

"Todos los negocios del señor Usmanov han sido auditados por las cuatro grandes [auditoras], desde su creación, al igual que sus declaraciones de impuestos y gastos personales", escribió su servicio de prensa. "Todas sus inversiones, sus gastos y sus ingresos han pasado por estrictos procedimientos de cumplimiento".

¿La ginecóloga más rica del mundo?

Saodat Narzieva es una obstetra y ginecóloga de 56 años que vive en Uzbekistán.

Lleva más de treinta años ejerciendo la medicina, y es de suponer que obtiene unos ingresos holgados como médico jefe adjunto del Hospital de Maternidad número 6 de Tashkent, la capital del país.

Aun así, su nivel de vida es inusualmente alto para una médico uzbeka.

Sus fotos de Facebook muestran que ha viajado a Venecia, Cerdeña y Dubai, volando en un jet privado, disfrutando de una sala VIP de la aerolínea y navegando en un yate.

También ha estado de vacaciones en la Costa Esmeralda, una franja de tierra a lo largo de la costa noreste de Cerdeña conocida por sus excelentes playas y aguas turquesas.

Y por si fuera poco, los datos filtrados de Credit Suisse muestran que Narzieva figura como beneficiaria de 27 cuentas bancarias suizas por las que han pasado miles de millones de euros a lo largo de los años. En su saldo máximo en abril de 2011, sólo una de estas cuentas tenía más de 1.900 millones de euros. Muchas de las otras también tuvieron saldos máximos de cientos de millones.

Obviamente, Narzieva no es una ginecóloga cualquiera.

De hecho, es la hermana de Alisher Usmanov.

Su estilo de vida es un ejemplo del tipo de lujo al que pueden acceder los familiares de los oligarcas. Pero sus riquezas –y esas cuentas en bancos suizos en particular– son también una prueba de cómo incluso los bancos occidentales más respetados pueden ayudar a ocultar las conexiones entre los oligarcas y su dinero.

No está claro por qué aparece Narzieva como beneficiaria de estas cuentas. Los datos muestran que se trata de cuentas corporativas, y en dieciséis de ellas aparece información de contacto asociada a USM Group, el holding gigante que su hermano utiliza para agrupar sus intereses empresariales.

Los datos filtrados de Credit Suisse no nombran las entidades legales concretas que poseen las cuentas. Pero uno de los números de cuenta de Narzieva coincide con un número de cuenta encontrado en los FinCEN Files, una filtración que contiene informes sobre transacciones financieras sospechosas. Esto permitió a los periodistas identificar la entidad como Gallagher Holdings, una de las principales sociedades de cartera que Usmanov utilizaba para controlar su fortuna.

Dado que se sabe que Usmanov era el beneficiario efectivo de Gallagher Holdings, los registros del Credit Suisse en los que figura su hermana como beneficiaria efectiva de su cuenta bancaria plantean dudas.

Además, diez de las cuentas de Credit Suisse se abrieron en 2013, un tiempo en el que Usmanov estaba reestructurando su imperio empresarial y abriendo empresas para Narzieva, para su otra hermana, Gulbakhor Ismailova, su marido y dos socios comerciales.

"Esta es una historia extraña", escribió Graham Barrow, especialista en delitos financieros, después de que los periodistas le transmitieran estos hallazgos.

"Desde mi experiencia, es bastante inusual que un miembro tan cercano de la familia sea utilizado como apoderado", destacó. "Es difícil saber por qué decidieron hacerlo en este caso, pero tal vez el hecho de que la hermana no fuera muy conocida, y una relación potencialmente estrecha y de apoyo entre el banco y Usmanov, condujo a un fallo en la debida diligencia".

El servicio de prensa de Usmanov se limitó a negar las conclusiones: "Negamos categóricamente que la Sra. Saodat Narzieva tuviera posesión o control de ninguna cuenta en bancos suizos en nombre de su hermano, el Sr. Alisher Usmanov, ni que tuviera ningún control de firma sobre ninguna cuenta relacionada con el Sr. Usmanov", indicó.

En una declaración enviada por correo electrónico a los periodistas, un portavoz de Credit Suisse afirmó que el banco "no puede hacer comentarios sobre posibles relaciones con clientes", señaló que "aplica todas las sanciones, en particular las dictadas por la UE, por Estados Unidos y por Suiza", y rechazó "las acusaciones e insinuaciones sobre las supuestas prácticas comerciales del banco".

Actividades sospechosas

Aunque 27 cuentas en bancos suizos parezcan muchas, sólo representan una fracción de las cuentas asociadas a Usmanov en el Credit Suisse y en otras instituciones bancarias de todo el mundo.

La filtración de los FinCEN Files –más de 2.100 Informes de Actividades Sospechosas (SAR, por sus siglas en inglés) presentados al Departamento del Tesoro de Estados Unidos por bancos y otros agentes financieros– muestra que Usmanov y sus empresas tenían decenas de cuentas más en el Credit Suisse y en otros bancos de Chipre, Rusia y Letonia.

Mientras que algunas de estas cuentas eran personales de Usmanov o pertenecían a sus negocios rusos, muchas otras estaban en manos de sus sociedades de cartera en el extranjero o de empresas pantalla que no parecían tener un objetivo empresarial claro y estaban registradas en jurisdicciones secretas como Chipre y las Islas Vírgenes Británicas.

Lo interesante de los datos de los FinCEN Files no es sólo la existencia de tantas cuentas bancarias, sino cómo Usmanov las utilizó para ocultar su riqueza.

Incluso los profesionales de la banca tuvieron problemas para averiguar cómo y por qué el dinero de Usmanov fluía por todo el mundo, desconcertados por el gran número de empresas aparentemente no relacionadas con las que realizaba transacciones.

Los SAR muestran cómo los funcionarios de los bancos señalaron repetidamente transacciones sospechosas por un total de miles de millones de euros, muchas de las cuales no tenían un objetivo comercial claro, mostraban signos de posible blanqueo de capitales, no tenían un origen claro o levantaban otras sospechas.

Por ejemplo, un empleado bancario del BNY Mellon, una entidad de crédito con sede en Nueva York que actuaba como banco corresponsal de Gallagher Holdings de Usmanov, identificó nueve cuentas bancarias pertenecientes a la empresa que realizaron 182 transferencias electrónicas sospechosas, por un total de más de 1.600 millones de dólares (unos 1.450 millones de euros), entre marzo de 2003 y enero de 2015.

En un informe presentado al Tesoro de Estados Unidos el 23 de diciembre de 2016, el empleado escribió que "las transferencias son principalmente sospechosas porque Gallagher... parece ser una entidad ficticia, constituida en Chipre y con operaciones bancarias en Chipre, Rusia y Suiza, que realiza una cantidad significativa de transferencias con otras numerosas entidades pantalla".

Como razones adicionales para la sospecha, el funcionario señaló una serie de otros puntos:

– Gallagher y varias de sus contrapartes fueron "identificadas en la investigación de los Papeles de Panamá, lo que significa que utilizaron al desprestigiado proveedor de servicios offshore Mossack Fonseca.

– “Muchas de las transferencias fueron enviadas en cantidades grandes, redondas y/o repetitivas".

– "Algunas transferencias enumeran bancos como remitente/beneficiario y el verdadero remitente/beneficiario no parece estar identificado en otra parte de los detalles de la transferencia".

– "El origen de los fondos y la finalidad de las transacciones no pueden determinarse".

Como ejemplo de una transacción especialmente sospechosa, el funcionario describió una transferencia de 49,5 millones de dólares (45 millones de euros) que Gallagher recibió en abril de 2004.

El dinero procedía de un "prestamista corporativo" con sede en las Bahamas llamado Sevenkey Limited –cuyo propietario, escribió el empleado bancario, "era un fideicomiso en beneficio de Igor Shuvalov, un antiguo ayudante de alto nivel de Putin".

Gallagher utilizó los 49,5 millones de dólares para adquirir una participación en un fabricante de acero británico llamado Corus Group.

"A BNY Mellon... le preocupa que los fondos provengan en última instancia de un individuo con vínculos tan estrechos con Putin", escribió.

Si bien estas transacciones involucraron a remitentes y destinatarios externos, un informe diferente presentado por Deutsche Bank en julio de 2017 muestra que Usmanov también movió dinero dentro de su propio imperio empresarial de manera que levantó sospechas.

Deutsche Bank informó de seis transferencias, por un total de más de 190 millones de dólares (más de 170 millones de euros), que Usmanov se envió a sí mismo durante un período de tres meses en 2017. Las transacciones se movieron "a través de múltiples cuentas personales y cuentas de entidades en el extranjero que [Usmanov] controla... sin ningún propósito económico aparente", dice el informe.

"Aunque los detalles de la transacción indican que los pagos se realizaron como ‘Transferencia de fondos propios’ o ‘pago de dividendos’”, Deutsche Bank advirtió de que "no pudo confirmar el propósito comercial de ninguna de estas transacciones a través de una investigación independiente."

En otro informe de febrero de 2017, Deutsche Bank mostró cómo Usmanov envió dinero a su hermana Narzieva, de una manera que planteaba dudas sobre su verdadera intención. El empleado del banco enumeró dos transferencias, por un total de más de 667.000 dólares (más de 600.000 euros), que le había enviado el año anterior bajo la descripción "transferencia de fondos familiares".

"Esto parece ser una suma de dinero inusualmente alta para transferir a un miembro de la familia", escribió el empleado bancario.

Un informe de mayo de 2017 presentado por el banco JP Morgan Chase destacó una transferencia de 2012 de tres millones de dólares (2,7 millones de euros) a Narzieva marcada simplemente como "regalo".

Cinco meses después, ella envió 100.000 dólares (90.000 euros) de vuelta a su hermano en dos transferencias. Los detalles del pago indicaban que los fondos habían sido enviados "al hermano para gastos corrientes", una afirmación divertida, teniendo en cuenta que el hermano de Narzieva es un multimillonario de fama mundial.

Otro informe, este presentado por Standard Chartered Bank en octubre de 2017, muestra lo que Narzieva parece haber hecho con la mayor parte de los tres millones de dólares que le envió su hermano.

"Después de recibir el regalo de tres millones de dólares", escribió el empleado del banco", ella "remitió fondos por un total de más de 2,5 millones de dólares a [Shokhrukh] Nasirkhodjaev", que ha sido "identificado como director de una empresa siderúrgica en los Emiratos Árabes Unidos".

"El propósito de las transferencias electrónicas entre Narzieva y la contraparte Nasirkhodjaev... no pudo establecerse", escribió Standard Chartered Bank, "ya que parecen dedicarse a diferentes líneas de negocio como médico y director general de una empresa siderúrgica, respectivamente".

Lo que no menciona el informe, pero que OCCRP confirmó a través de los comentarios que aparecen en su cuenta de Facebook, es que Nasirkhodjaev es el yerno de Narzieva.

Fideicomisos y secretos

Los activos más concretos de Usmanov –acciones de su imperio empresarial, bienes inmuebles y un megayate– están ocultos en fideicomisos o son propiedad de empresas offshore cuya propiedad exacta, y conexión con él, es difícil de establecer.

En 2018, después de que Rusia se enfrentara a una nueva ronda de sanciones de Estados Unidos, Usmanov reorganizó sus estructuras corporativas, poniendo el 49 por ciento de los activos principales de USM bajo su propio control inmediato a través de Rusia. El 51 por ciento restante sigue disperso entre múltiples socios comerciales y empresas en paraísos fiscales de todo el mundo, lo que hace imposible sancionarle con las normas actuales.

Gracias al derroche de Usmanov en el uso de sociedades offshore secretas, resulta difícil atribuirles de forma indubitada los activos personales que él y los miembros de su familia han adquirido a lo largo de los años.

Aunque se sabe que el superyate Dilbar, de 540 millones de euros, pertenece a Usmanov, la propiedad de un helicóptero Airbus H175 que se encuentra en el yate fue transferida en 2018 a una empresa de las Islas Caimán que no puede ser rastreada hasta él.

El helicóptero puede ser vinculado definitivamente a Usmanov después de esa fecha sólo porque ha sido fotografiado en el yate.

El servicio de prensa de Usmanov escribió a los periodistas que el propio yate ha sido transferido a un "fideicomiso irrevocable" del que no es propietario y cuyos derechos de usufructo han sido "donados" a su familia.

También pertenecen a un fideicomiso, escribió su portavoz, los bienes inmuebles que Usmanov posee en el Reino Unido. La más conocida de sus propiedades es Sutton Place, una casa señorial del siglo XVI en el condado inglés de Surrey.

La propiedad, que valía al menos 36 millones de euros cuando se puso a la venta en los años 90, está tan vinculada a Usmanov que incluso en su página de Wikipedia figura como propietario. Pero las dos empresas chipriotas que la poseen son a su vez propiedad de una sociedad de servicios fiduciarios que no puede ser vinculada a Usmanov a través de documentos. El Financial Times investigó la cuestión de si Usmanov es "realmente dueño" de Sutton Place, y no pudo llegar a una respuesta.

Por último, como parte del proyecto Radar de Activos Rusos (Russian Asset Tracker, en inglés) coordinado por OCCRP, los periodistas identificaron seis villas costeras relacionadas con Usmanov en la isla italiana de Cerdeña.

Sólo es propietario directo de una de ellas. Otras dos son propiedad de su hermana Gulbakhor Ismailova. El resto están en manos de complejas estructuras societarias que conducen a una empresa constituida en las Bermudas.

El rastro se habría perdido allí, si no fuera por una hoja de cálculo de facturación que vincula a la empresa con Usmanov y que fue desenterrada en un conjunto de registros filtrados de un proveedor de servicios offshore.

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Estas son las averiguaciones que se necesitan para conectar a uno de los multimillonarios de Rusia con sus propias posesiones.

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Olesya Shmagun (OCCRP), Matthew Kupfer (OCCRP), Rustam Ismailov (OCCRP) y Cecilia Anesi (IrpiMedia) han contribuido a este reportaje con sus informaciones.

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